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Invertir en coliving: ¿oportunidad real?

Seguramente ya habrás oído hablar de conceptos como coliving, cohousing o coworking. Todos ellos son conceptos que no han dejado de ganar popularidad en los últimos años en Europa y que vienen a definir un nuevo modelo de gestión de viviendas y espacios colaborativos. Lo singular en todos ellos es que no sólo se plantean como una solución habitacional sino que sitúa la opción de invertir en coliving entre las más rentables de los últimos años.

En este artículo hablaremos de qué es el coliving, qué tipos de espacios colaborativos existen y por qué suponen una gran oportunidad de inversión para muchos. Además, exploraremos la relación existe entre el mundo de la valoración y el coliving, así como de qué finalidades son las más frecuentes actualmente.

¿Qué es el coliving?

El coliving es un modelo de vivienda colaborativa, basada en la idea de compartir una serie de espacios y servicios comunes en inmuebles, al tiempo que cada usuario goza del uso de una habitación o espacio de uso privado.

Este modelo fue originalmente concebido para jóvenes estudiantes, emprendedores y nómadas digitales, pues entre sus ventajas, además del alojamiento, ofrece el disfrute de una serie de servicios (internet, gimnasio, suministros básicos, garaje, etc.) y de espacios en los que compartir experiencias con otros usuarios de la instalación.

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¿Qué tipos de coliving existen?

A la hora de hablar de coliving hay que distinguir entre varios tipos de modelos en función de sus objetivos, modelo de negocio y utilidades. El término coliving se utiliza de manera general para hacer alusión a un modelo de vivienda colaborativa. Es el término que más se ha popularizado, pero es preciso señalar que existen varios tipos de experiencias colaborativas, como el cohousing y el coworking, que comentaremos a continuación.

  • El cohousing hace alusión a un proyecto compartido de propiedad de un bien inmueble en el que los miembros participan en la planificación y la gestión del proyecto, lo que implica una vinculación con el mismo a medio y largo plazo. No tiene por qué estar orientado sólo a un fin residencial, sino que existen algunas opciones enfocadas a la compartición de experiencias concretas: proyectos rurales o en la naturaleza, residencias para personas mayores, etc.
  • El coliving, por su parte, hace alusión a un proyecto de un promotor encaminado a ofrecer alojamiento y servicios a usuarios con estancias cortas, sin que exista una vinculación más allá con el proyecto. Su enfoque a estudiantes y profesionales tecnológicos hace más propicio que su ubicación se dé en los núcleos urbanos. Además, un punto fuerte de esta opción es el acento que se pone en el fomento de la interacción social y la colaboración, que va desde el uso conjunto de espacios de trabajo hasta potenciar cocinas o gimnasios como lugares de socialización.
  • El coworking es un concepto que hace referencia a un espacio común para desarrollar actividades profesionales por parte de una serie de usuarios. Es decir, que el vínculo entre usuarios y proyecto de coworking termina en el momento en que dejan de utilizar las instalaciones y el fin único de estas es aportar un espacio de trabajo adecuado a sus usuarios.

En resumen, las diferencias entre coworking, coliving y cohousing vienen dadas por cómo se configuran algunos factores como la duración de la estancia, la edad de los residentes, la ubicación de las instalaciones, la relación entre espacios comunes y espacios privados y el tipo de uso de todos ellos.

¿Por qué valorar los activos de un coliving?

Además de los bienes inmuebles, los activos fijos tienen un gran peso en los proyectos de coliving. De ello se deriva que a menudo una de las mayores preocupaciones de los promotores de proyectos de coliving es la de controlar el valor de todos los activos fijos del proyecto. Sin embargo, en lo que a la parte de inmobiliario se refiere, hay que señalar también algunas finalidades que hacen necesario recurrir a servicios de valoración para coliving:

Invertir en coliving: planificación de estrategias de negocio

Conocer el valor del coliving es necesario para calcular la rentabilidad de la inversión, tanto a nivel de promotores como de inversores, tal y como veremos con detalle más abajo. En este sentido, valorar es sinónimo de tomar decisiones informadas de cara al futuro: inventario y renovación de activos, riesgo de la inversión, obtener información y garantizar el cumplimiento de la normativa de cada Comunidad Autónoma, etc.

Tasación hipotecaria de coliving

A la hora de poner en marcha un proyecto de coliving por parte de un promotor, uno de los aspectos clave tiene que ver con la ubicación y, en particular, con el inmueble que en el que se va a desarrollar la actividad. En este sentido, es frecuente que sea necesaria una inversión para compra de un inmueble y, en ocasiones, la financiación de la compra es imprescindible. Así, el préstamo hipotecario se convierte en un elemento necesario para poner en marcha el proyecto, lo que a su vez exige disponer de un informe de valoración del coliving que acredite el valor de la propiedad que sirve de garantía para el préstamo hipotecario. 

Valoración para seguros

A la hora de poner en marcha un negocio de coliving, los gestores son los encargados de contratar las pólizas de seguro adecuadas. En este sentido, es frecuente que sea necesaria la tasación de algunos de los activos para garantizar que las pólizas cubren adecuadamente el valor del negocio y establecer la cantidad a cubrir en determinadas ocasiones. 

Valoración para fines fiscales

El caso de la valoración para fines fiscales para coliving es similar al que tiene lugar para cualquier particular; ante una discrepancia en materia tributaria, el gestor solicita una valoración del coliving con fines fiscales que le permita disponer de un documento válido ante Hacienda en el que se rebata el dictamen de la Administración Pública. 

Invertir en coliving: ¿una oportunidad real?

La idea de invertir en coliving ocupa un lugar destacado entre las opciones disponibles actualmente para numerosos fondos de inversión. Con todo lo dicho hasta ahora, cabe preguntarse por qué se está dando un aumento de la demanda tan importante desde hace pocos años y quiénes son los principales solicitantes de valoraciones relacionadas con proyectos de coliving.

Y es que, como consecuencia de todo lo que hemos señalado, el coliving demuestra ser no sólo una gran oportunidad para vivir por parte de sus usuarios, sino una alternativa cada día más atractiva para posibles inversores. De hecho, desde las primeras experiencias de coliving poco antes de la pandemia, el mercado no ha hecho más que crecer y se espera que siga creciendo en el corto plazo. 

Además, se trata de un negocio orientado claramente hacia un sector social caracterizado por un alto dinamismo y una gran movilidad geográfica, y que precisamente por ello buscan alojamientos en los que poder tener interacciones sociales sin que ello implique un compromiso de residencia a medio o largo plazo.

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Por ello, los grandes núcleos urbanos con gran afluencia de estudiantes y de trabajadores y nómadas digitales son la apuesta más frecuente para operadores e inversores en coliving.

En la balanza, ganan peso algunas de ventajas como el hecho de que se trata de una combinación de alquiler flexible sin llegar a la altísima movilidad de los alquileres turísticos, pero sin la rigidez que implica un alquiler a largo plazo. Esta rotación moderada de inquilinos permite un ajuste constante de ingresos regulares y un rendimiento continuo para inversores en un momento en el que el mercado de la vivienda se enfrenta a un debate para su redefinición de cara al futuro.

Estos son sólo algunos de los argumentos que convierten la opción de invertir en coliving en una seria alternativa a considerar por parte de inversores y de operadores. En resumen, nos encontramos ante una solución habitacional que conjuga soluciones a varios niveles: por un lado, permite a muchos usuarios satisfacer sus necesidades particulares de vivienda y determinados servicios, mientras que, por otro lado, posibilita a operadores e inversores plantear nuevas estrategias para la obtención de rentabilidades en un mercado en constante cambio.